sábado, 7 de julio de 2012

3 años después

Me habían dicho que eras una persona con tendencia hacia la depresión. No lo creí, no quería creerlo. ¿Cómo podía ser que un símbolo de los momentos más felices de mi infancia se encontrase en esas condiciones? Pasaron ya 10 años de la primera gota de un vaso que se fue llenando.. de tus propias lágrimas, de las de todos al ver como el tipo más incondicional se iba deteriorando lentamente. Lloro mientras escribo... se me vienen un montón de cosas a la cabeza: Miramar, la bicicleta, el ajedrez.... en mi puta vida te había podido ganar. Hasta la última partida, en la que ya no podías concentrarte. Y luego vino mi tío, de Israel, con toda la familia. Ahí supe que era la última vez que te iba a ver con vida... y siempre queda esa sensación de mierda, de que no se dijo todo... de que no se dijo nada. Y pensar que dentro de una semana cumplirías años... 76 todavía jóvenes años para un abuelo. 
No creo que exista algo de vos que pueda estar viendo lo que escribo, no creo en todo lo que creías vos. Es simplemente un llamado a aquel Zeide Jaime que quedó en mi memoria... en la que me veo a mi mismo como un nene feliz, junto a su abuelo feliz. 

Gracias.

Jaime David Brandriss (14/7/36 - 7/7/09)



2 comentarios:

  1. Sos lo tierno amigo ♥, cómo te entiendo.

    ResponderEliminar
  2. un poco de el, quedo en cada uno de nosotros. cada uno que recuerda su sensibilidad, simpatia y ayuda al projimo, su carino y orgullo por la familia lo hace revivir por un instante. Sergio

    ResponderEliminar

Comentario/opinión/crítica/puteada